"...me trae la voz, la voz deseada,
De mi padre que vuelve y que no ha muerto."
De mi padre que vuelve y que no ha muerto."
Mi abuelo me miraba mientras comía. Mi padre estaba a su lado. También comía. Yo, mis hermanos, y nadie más estabamos sentados en frente. Mi abuelo reía, y hablaba, como si nunca nos hubiesemos dejado de ver. Yo también reía, porque estaba ahí, sentado en frente mío, y comía.
Yo pensaba, mientras lo miraba reir, si sabía. Parecía no saber, quizá por eso estaba tan feliz. Yo sí sabía. Esto es un sueño, y mi abuelo no está, desde hace años. Pero no quería decir nada, porque tenía la esperanza de que mi abuelo siguiera así, cerca mío, disfrutando del momento como yo lo hacía. Sabía que no era un sueño y me preguntaba, ¿qué pensará de mí ahora? Ya no soy el niñito que lo vio por última vez hace más de un siglo, ya debería ser lo que él esperaba de mí. Quizá no sea eso. Estoy seguro de no serlo. No quería decir nada porque esperaba que en el sueño, el suyo, el que estaba soñando desde donde quiera que las personas buenas se van, piense que yo era lo que él esperaba. Queríaque su risa fuese una aprobación, que su presencia fuese un mensaje. Él tampoco quizo decir nada, porque sabía que era un sueño, y creo que no quería que yo despertara.
